Tomado de http://www.iesf.es/fot/pensiones-centro.gif
El otro día leía la prensa: Las empresas toman la democracia de EEUU, Noam Chomsky iba más lejos decía que el día 21 de Enero de 2010 sería un día negro para la democracia: “Ahora, los gerentes de las compañías podrán, de hecho, comprar directamente comicios, eludiendo vías indirectas más complejas” y lo peor de todo es que esto se vende como la libertad de todos a apoyar en las elecciones. Está claro, esta libertad se ejerce con los votos y no con el control económico de los candidatos, que lógicamente no morderán la mano que les da de comer (no los electores, sino quien paga las campañas). Esto de la libertad de elección es genial, el problema es que normalmente implica que eligen los que tienen dinero para hacerlo, y no el común de los contribuyentes, ergo electores.
Esta necesidad de aprobación de los de la pasta, subyace también en otra polémica muy reciente: las pensiones. ¿Cuál es el problema?, que poniéndonos duros con lo público, nos congraciaremos con los popes de la economía, que por cierto con sus grandes ideas casi nos dejan en cueros o como defiende en una magnífica entrevista Miren Etxezarreta, los bancos quieren hacer buenos depósitos de pensiones, cautivos durante años, para especular, por ejemplo, contra el euro. Este segundo artículo explica muchas cosas sobre el repentino interés por las pensiones.
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